Tras las huellas de los celtas y vettones
En en el blog de Hostelería de Ávila te invitamos a sumergirte en la historia de nuestra región, tierra de celtas y vettones. Aquí, el legado ancestral se fusiona con la belleza natural, creando un escenario perfecto para pasar unos días de ensueño.
Acompáñanos en este viaje por los rincones más enigmáticos de Ávila, donde el arqueturismo cobra vida.
¿Qué es el arqueturismo?
El arqueturismo es una forma de turismo que se centra en la exploración de sitios arqueológicos, ofreciendo una ventana única al pasado. No solo te permite visitar ruinas y monumentos antiguos, sino también comprender el contexto cultural e histórico que les dio origen.
Este enfoque multidisciplinario combina elementos de cultura, historia, y naturaleza, permitiendo a los visitantes disfrutar de una experiencia auténtica y educativa.
En el caso de Ávila, el arqueturismo cobra un significado especial. La provincia es rica en yacimientos que reflejan su herencia celta y vettona. Este tipo de turismo te permite no solo ver las antiguas construcciones, sino también entender las tradiciones, rituales y modos de vida de estas civilizaciones.
Además, se añade un componente natural al situar muchas de estas reliquias en paisajes de extraordinaria belleza, lo que multiplica el valor de la experiencia.
Una de las ventajas del arqueturismo es que suele ser un tipo de turismo sostenible. Los sitios a menudo son gestionados para preservar su integridad, y las visitas se organizan de manera que minimizan el impacto en el entorno.
Además, promueve la educación y la conciencia cultural, lo que ayuda a apreciar y conservar estos tesoros para generaciones futuras.
Hacer arqueturismo en Ávila
Como te decíamos, Ávila es un destino perfecto para el arqueturismo debido a su rica historia y paisajes sobrecogedores. La provincia está salpicada de castros y asentamientos antiguos, principalmente celtas y vettones, que ofrecen una perspectiva única sobre la España prerromana.
Estos sitios no son solo espacios donde se conservan artefactos y construcciones antiguas; también son lugares donde se puede vivir una forma de turismo que va más allá del mero espectáculo visual.
Adentrarse en el mundo del arqueturismo en Ávila es, en efecto, un viaje multidimensional. Los visitantes pueden complementar sus visitas a lugares arqueológicos con actividades como rutas de senderismo que atraviesan bosques y montañas, añadiendo una matiz natural a la experiencia.
Además, varios de estos sitios ofrecen visitas guiadas, exposiciones temporales y actividades interactivas, diseñadas para proporcionar una comprensión más profunda de las civilizaciones que una vez habitaron estas tierras.
En la ciudad de Ávila misma, la muralla medieval es un testimonio de épocas posteriores, pero su presencia añade una capa adicional de significado histórico al entorno.
De esta forma, el arqueturismo en Ávila no es una actividad aislada, sino parte de un mosaico más amplio de atracciones culturales y naturales. Los viajes suelen ser muy versátiles, permitiendo a cada turista encontrar su propia mezcla de historia, cultura y belleza natural.
Principales castros celtas y vettones de Ávila
Si uno se adentra en la búsqueda de arqueturismo en Ávila, encontrará una variedad de castros celtas y vettones que son de obligada visita. Entre los más notables, destaca el Castro de Ulaca, situado en Solosancho, que es uno de los asentamientos prerromanos más importantes de la península Ibérica.
El Castro de La Mesa, en el término municipal de Chamartín, es otro yacimiento relevante donde se pueden observar complejas estructuras defensivas y áreas de culto. No menos interesantes es el yacimiento del Castro de Castillejos en Sanchorreja, que permiten a los visitantes entender mejor la estrategia de asentamiento de estas civilizaciones.
Estos lugares no sólo son monumentos históricos, sino también miradores naturales que ofrecen panorámicas impresionantes de la región, lo que multiplica su atractivo y profundiza el significado de la visita.
Dónde alojarse en Ávila
Para quienes deseen hacer de Ávila su base para explorar los tesoros arqueológicos de la región, las opciones de alojamiento son diversas y adaptadas a diferentes necesidades. Los hoteles en el corazón de la ciudad ofrecen una experiencia de lujo con fácil acceso a la muralla y otros puntos de interés histórico.
Sin embargo, si se prefiere un enfoque más rural y cercano a la naturaleza, las casas rurales y los pequeños hoteles en las cercanías de los castros son una opción ideal.
Por supuesto, no se puede dejar de lado la rica gastronomía con la que poder maridar una experiencia así. Cada zona de la provincia tiene guardadas para el visitante muy variadas opciones culinarias para satisfacer sus paladares.
Nada mejor para este mes de noviembre que descubrir la historia ancestral de una provincia milenaria como la de Ávila. ¡Te esperamos!