Si eres de los que disfruta con el manto blanco cubriéndolo todo, octubre es el mes perfecto para empezar a planificar tus vacaciones invernales.
Con la llegada de la temporada alta, los alojamientos se llenan rápidamente y reservar con antelación te permitirá asegurar los mejores precios y disponibilidad.
Cuando hablamos de nieve y de Ávila, muchos piensan solo en la capital y sus famosas murallas, pero la provincia tiene mucho más que ofrecer y hoy te lo vamos a contar. Ponte las botas, abrígate bien y sigue leyendo.
¿Cuándo empieza a nevar en Ávila?
La nieve en Ávila puede llegar en cualquier momento entre mediados de noviembre y finales de marzo, dependiendo del año. A veces, incluso antes.
La sierra de Gredos es la primera en cubrirse de blanco, y cuando nieva en la capital o en los pueblos, las estampas son dignas de postales.
Si estás pensando en hacer una escapada para ver la nieve, octubre es un mes perfecto para reservar tu hospedaje, ya que, durante esos meses, son muchas las personas que acuden a esas zonas y es difícil encontrar alojamiento.
Lugares para disfrutar de la nieve en Ávila
Ávila es mucho más que su capital. Los pueblos de la provincia tienen un encanto especial, y con nieve, más todavía. Aquí te dejamos algunos de los lugares más bonitos para disfrutar de la nieve en Ávila. ¡Seguro que te sorprenden!
El circo de Gredos
Si hay un lugar que no puedes dejar de visitar en invierno, ese es el circo de Gredos. Es un auténtico espectáculo de la naturaleza, con sus cumbres nevadas y sus impresionantes vistas. La ruta hasta la Laguna Grande es la más conocida y, aunque en invierno se complica un poco, merece la pena el esfuerzo.
Eso sí, asegúrate de llevar buen calzado y ropa de abrigo, porque en cuanto empieza a nevar, las temperaturas bajan bastante. Si te animas, te espera un paisaje impresionante, casi como de otro mundo.
El puerto del Pico
El puerto del Pico es uno de esos lugares que, cuando nieva, se transforma por completo. Además de las vistas espectaculares que tiene, puedes disfrutar de un trozo de historia con su calzada romana, que sigue casi intacta después de tantos siglos.
Subir al puerto del Pico con nieve es una experiencia que te recomendamos. Eso sí, ten cuidado con la carretera, que se pone un poco resbaladiza, y si te apetece hacer alguna ruta, ve bien preparado. Desde aquí, las vistas del Valle del Tiétar con nieve son impresionantes, así que no olvides la cámara de fotos.
Navarredonda de Gredos
Navarredonda de Gredos es un pueblo con un encanto especial. Aquí, la nieve cubre los tejados y las calles, dándole un aire de cuento. Es perfecto para una escapada de fin de semana en una casa rural o en un hotel, con la chimenea encendida y una buena comida casera. Eso sí, reserva cuando antes tu alojamiento, ya que las estancias suelen agotarse rápidamente.
Además, desde aquí tienes varias rutas de senderismo que te llevarán a rincones espectaculares de la sierra. Después de una buena caminata, nada mejor que disfrutar de un plato de patatas revolconas en alguno de los restaurantes del pueblo. Un plan perfecto para disfrutar de la nieve y de la gastronomía local.
Hoyos del Espino
Hoyos del Espino es otro de esos pueblos que en invierno ganan aún más encanto. Además de ser el punto de partida para muchas rutas por Gredos, tiene unas vistas espectaculares de la sierra.
Si prefieres algo más tranquilo, te recomendamos un paseo por el pueblo, disfrutando del aire puro y la tranquilidad que se respira. No olvides visitar el puente del Duque, especialmente bonito cuando está nevado.
La nieve en la ciudad de Ávila
Aunque la nieve en la capital no es tan frecuente como en la sierra, cuando cae, la ciudad cambia por completo. Las murallas cubiertas de nieve son una de esas imágenes que se quedan en la retina e incluso su lienzo norte es utilizado como una improvisada pista de trineos.
Dar un paseo por el casco histórico con el suelo blanco es una experiencia que no te puedes perder. Además, después del paseo, no hay nada mejor que entrar en alguno de los bares de la ciudad a disfrutar de una buena tapa abulense.
Como ves, la provincia de Ávila tiene mucho que ofrecer en invierno. Pero recuerda, los mejores alojamientos se reservan con antelación. No te quedes sin tu rincón perfecto para disfrutar de la nieve y asegúrate una escapada inolvidable. ¡Te esperamos!